RIOS VENIDEROS

Ríos venideros

En los tiempos que nos quedan, solo Dios sabe,
Sólo Dios sabe cuando todo empezará caer

Es inevitable escuchar que estamos en tiempos de restauración, donde cada pieza está siendo colocada en su lugar. Cada don, gracia y ministerio dentro la Iglesia está siendo restaurado para capacitar a los santos para hacer la obra del ministerio y la edificación del cuerpo de Cristo.

Y aleluya¡
Porque el Señor viene por todos, por cada parte de la Iglesia, no solamente por aquellos que tiene una mayor comprensión de su propósito.

Por todos¡

Todos los que hemos proclamado su nombre y esperamos su venida.

Todos¡
Desde el más dotado, al menos notorio.
Desde el más lejano, hasta el más cercano
Todos¡
Las dos realidades se confrontan

En Mateos 7:24 hay dos realidades representadas en dos Iglesias, una prudente y la otra insensata. En ambos casos se tiene la voluntad de poner manos a la obra, aparentemente las Iglesias son iguales, aparentemente nada las derriba. El tiempo transcurre y empieza la lluvia, luego vienen los vientos y finalmente el río derriba lo que todavía está en pie.

DE AQUÍ A POCO, TODO LO LEVANTADO EN LA IGLESIA QUE ES HUMANO, CAERÁ Y LO LEVANTADO EN JESUCRISTO, PERMANECERÁ.

Dios nos libre de la gran tragedia que ha de sobrevenir.

Al examinar las ruinas de la Iglesia que cayó, no hay nada, quizás unos pequeños troncos clavados en la arena. Todo fue arrastrado y no permaneció. Junto a este panorama desolador vemos una roca inconmovible que ya no está sola, tiene una gran casa, con algunas ventanas rotas, pero firme. La casa y la roca son una sola por siempre.

Aleluya¡¡

El cimiento y la casa terminan siendo UNO.

Junto a esta maravillosa casa, yacen los tablones de aquella que alguna vez fuera una construcción. En vano trabajaron los edificadores porque Dios no edificó la casa. No le consultaron a Él, nuestro maravilloso perito arquitecto.
Sacaron la piedra que es cabeza del ángulo, se pusieron a ensayar un nuevo modelo o a probar que les resultaba mejor, quizás clavar las estacas en la arena les resultó más fácil y rápido que edificar sobre la roca, pero bastó que se desataran LA LLUVIA, EL VIENTO Y LOS RIOS Y NO QUEDÓ NADA.

EDIFICAR SOBRE LA ROCA LLEVA TIEMPO Y SACRIFICIO.

EL INSENSATO EDIFICA SOBRE LA ARENA, NO TIENE VISIÓN EN LO QUE VIENE Y SE DESLUMBRA EN EL PRESENTE: “ TENER UNA CASA EDIFICADA”, “TENER RESULTADOS” AUNQUE SEA SOBRE LA ARENA.

¡Cuántos ministerios perecerán en la crecida de los ríos!.
¡Cuántos han sido arrastrados por la corriente de este mundo!
Amados
¿Qué es lo que nos lleva a edificar sobre la arena?
Lo rápido, el facilismo, la comodidad, la falta de visión, el elegir liderazgo sin quebrantamiento, probando formas sin cimientos y sin visión.
Al igual que Lot cuando elige las atractivas y codiciables llanuras cerca de Sodoma, lo atractivo está ahí. En la inmediatez sin saber que tiempo después estaría siendo esclavo de su decisión.

A nuestra Iglesia lo primero que llegan son las lluvias, aparentemente lo más tenue y menos destructivo, en este sentido, las lluvias lo primero que prueban es la FE.

Así como la semilla en Mateos 13:19 que cae junto al camino, el malo viene y la arrebata.

Porque la FE viene por el oír la palabra de Dios, y la FE es la puerta. En este caso la Iglesia escuchó la voz de Dios y no entendió e inmediatamente viene nuestro adversario y arrebata aquella semilla gloriosa que iba a dar fruto. Tanto así llegan las lluvias y prueban la FE de un cristiano.
Llegan las herejías, las falsas doctrinas que dicen que todo está hecho y que sólo nos queda esperar sin levantarnos para hacer la obra del ministerio.
Llegan aquellas voces provenientes del mismo infierno que nos dicen que ya todo está acabado y que a las obras del diablo no hay que reprenderlas. Menos orar ni interceder para que las potestades retrocedan. Aquellas herejías que quieren callar la voz profética de la Iglesia, la única voz en la tierra que puede proclamar la eterna victoria de Jesucristo sobre nuestro adversario en la cruz.

Una iglesia cimentada en la arena cambia por la doctrina, música, libro o autor de moda. Puede cambiar porque el Señor Jesucristo es su roca MAS sus particulares referentes y la propia interpretación de las escrituras o por más que rechacen el concepto de tradición, su experiencia termina definiendo a quienes aceptan y a quienes no.
¡ Hay del que en medio de ellos se levante con otra línea teológica!

Lo segundo que viene a nuestra Iglesia es el azote de los vientos, primero fue la lluvia que venia a probar la FE, después viento mas lluvia, se hace permanente el azote.

En Mateos 13:20 se nos da la interpretación de aquella realidad que recibe la palabra con gozo y al parecer no se le habló del precio que tenía que pagar (Edificar sobre la roca).
Hay de aquellos ministerios que predican una salvación a medias, un evangelio ligth. Debemos decir que en este caso la palabra se recibe y produce gozo, quizás permanece por algún tiempo, pero luego se seca, sale el sol y quema la semilla porque no tiene profundidad y se ha quedado en el pedregal, su destino era caer en la tierra, descomponerse y dar mucho fruto, pero no cayó en la tierra, cayó entre las piedras, tal cual el viento asolando aquella casa cimentada en la arena, es en ese momento donde se empieza a mover la estructura, y los cimientos comienzan a ceder. Sin embargo, aquel cuyo cimiento está en Cristo permanece aunque se le vuelen algunas planchas del techo, su cimiento es inconmovible.
Aquella Iglesia que niega el poder de la cruz, y abre las puertas a la teología de la prosperidad olvidará el pecado, una Laodicea de estos tiempos:

“Porque tu dices: Yo soy rico, y me he enriquecido, y de ninguna cosa tengo necesidad; y no sabes que tú eres desventurado, miserable, pobre, ciego y desnudo” Apocalipsis 3:17

La iglesia no puede negar el trato de Dios, el evangelio no es tirar y abrazarse, el evangelio es poder y renuncia, salvación y quebrantamiento, ganancia y pérdida, inviernos y veranos, el evangelio es dejarlo todo por el Señor, no por una institución, no por el “ungido” ministro, por Cristo.
La Iglesia que olvida la cruz olvida el pecado porque estamos desesperados por la bendición.

DE AQUÍ A POCO EL ÚNICO LUGAR EN LA TIERRA DONDE A LO QUE ES BUENO SE LE LLAMARÁ BUENO Y A LO MALO, MALO SERÁ EN LA IGLESIA DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO.

La hora del descalabro
Aquella casa que se estaba empezando a mover, es arrasada por el río.

Si con el viento era lento, el río le da el golpe de gracia para que no quede nada.

Según Mateos 13:22, tal cual es la semilla que quedó en tierra; se creyó a la palabra, se soportó la tribulación, pero el tercer enemigo es más terrible que todos los demás porque ahoga la semilla, no la deja dar fruto, aparentemente es una planta de la misma especie (vegetal), pero lo que alguna vez crece al lado de la semilla la termina ahogando. Esa semilla lucha por dar fruto, pero el afán, el estrés, la vanagloria, las riquezas, los argumentos, la falta de tiempo y en el caso de la Iglesia, usarla como plataforma para el éxito y reconocimiento personal, terminan haciendo sucumbir la promesa. Todo lo esperado termina siendo un fracaso. El río viene con todo, seguramente arrastrando otros despojos, nuestra casa en la roca había resistido los embates de la lluvia y después el viento, ahora viene el río con todo, logra arrancar una puerta y entrar a la casa, pero luego baja y la casa sigue ahí con su cimiento intacto.

VIENE EL RIO, VIENE EL RIO

Aleluya,
Qué tremenda es la persecución en el corazón, disputado entre amar a este mundo y las cosas que están el mundo o a Dios.
Cómo es perseguido nuestro corazón para arrebatarnos y ahogar nuestro primer amor.

EL AMOR DE MUCHOS SE ENFRIARÁ.

Los espinos crecerán como nunca, este mundo nos ofrecerá uno y otro pacto o alianza para que la obra se detenga, tal cual en los tiempos de Nehemías mientras construían el muro, tal cual en los tiempos de Abraham cuando tenía que vivir por fé y los reyes de Sodoma y Gomorra quieren hacerlo prosperar rápidamente y no por FÉ.
Vienen tiempos de pedregales, vienen tiempos en que el enemigo se levantará con las últimas artimañas que le quedan.
Vienen otros amores a golpear la puerta de la Iglesia para hacer pactos para impedir su restauración.

La cuarta semilla
Pero en la Iglesia del Señor que está sobre la roca que es Cristo se manifestará la promesa: Basta una semilla que caiga en buena tierra, basta una promesa que se cumpla y será a 30 a 60 y a 100 por uno. Ese es el destino de la promesa eterna.
EJEMPLOS:
Cristo, el 30, los 12 el 60, los 120, el 100
Abraham, el 30, Isaac el 60, Jacob, el 100
Santiago, el 30, Chile, el 60, las naciones, el 100 (coloca tu ciudad y pais)
ABRAHAM: SE LE DA LA PROMESA
SE LE PRUEBA LA FE: Se le dice que deje su tierra y parentela. Deja la tierra pero se lleva a Lot.
SE LE PRUEBA EN LA AFLICCIÓN: Habiendo obedecido, se desata el hambre en la tierra y el se va a Egipto olvidando la provisión divina. (Todo el que vuelve atrás en medio de la persecución vuelve a Egipto)
LOS ESPINOS QUIEREN AHOGAR LA PROMESA: Los reyes de Sodoma quieren hacer pacto. Y Abraham lo rechaza, bastaba que hubiera recibido una correa del calzado para estar por siempre ahogado por el mundo.

QUE VENGAN TUS RIOS SEÑOR
Y QUE TODO LO FALSAMENTE CONSTRUIDO
CAIGA ANTE TUS PIES
QUE VENGAN TUS RIOS SEÑOR
Y SEAN DERRIBADOS
TODOS LOS FUNDAMENTOS HUMANOS
QUE VENGA TUS RIOS SEÑOR
Y SEAN PROBADOS
LOS MINISTERIOS
EL LIDERAZGO
LAS FORMAS DE GOBIERNO
LOS MATRIMONIOS
LOS NOVIAZGOS
REMECE NUESTRAS MOTIVACIONES
SACUDE NUESTRAS INTENCIONES
ANTES DE LA CUARTA SEMILLA
TODO LO NO EDIFICADO EN TI
SEA DERRIBADO
TODO LO HUMANO
TODO ORGULLO
TODO LO MUNDANO
SEA DESTRUIDO
PARA QUE LA ROCA INCONMOVIBLE
TOME SU LUGAR
CABEZA DEL ÁNGULO.
Y LEVANTA SEÑOR
TODO LO FUNDAMENTADO EN TI
HAZLO PREVALECER COMO LA LUZ
DE LA AURORA
HAZLO CONOCIDO
HAZLO REFLEJO DE TU GLORIA
AMÉN
Septiembre 2004. Alberto Rojas comunidadescristianas@gmail.com